jueves, 18 de septiembre de 2008

¡La caja tonta se supera!


En efecto. La caja tonta lo es cada vez más. Aunque también cabría pensar que los tontos somos nosotros, pagadores de la televisión pública.

Es una pena pensar que parte de nuestro dinero está destinado a cubrir el sueldo de miles de personas cuyo trabajo se limita a leer un guión y a lucir su cuerpo, mientras presenta un programa sin sentido cuyos participantes también sacan partido.

Un buen ejemplo es el de nuestra queridísima Anne Igartiburu, quien presentará la próxima edicion del magnifico programa ¡Mira quién baila!. ¿Para qué ofrecer trabajo a nuevas promesas pudiendo dárselo a gente que está hasta las trancas de dinero?. Y lo mejor de todo son los grandísimos invitados a dicho programa, entre los que se encuentran Ana Obregón, merecedora de un premio a la niña más vieja del mundo, Ortega Cano, supuestamente torero, o Terelu Campos, la siempre hija de Mª Teresa Campos.

Pues en personajes de este tipo se invierten grandes cantidades de dinero proveniente de nuestro bolsillo. Visto de forma separada ya es un gran problema. Pero, ¿y si tenemos en cuenta la gente que se muere de hambre y no recibe ni un euro de ninguno de nosotros? La cosa ya no es un gran problema, desde mi punto de vista es algo realmente terrible. ¿Dónde está la democracia? ¿acaso la gente prefiere malgastar el dinero de esa forma a ayudar a los necesitados? ¿Quién mueve este negocio? ¿Por qué no podemos decidir el destino de este dinero?



El cielo esta nublado, ¿quién los despejará...?

1 comentario:

Alicia dijo...

Uf...podría tirarme horas enumerando programas televisivos inútiles, sacadineros y que solo sirven para atraer nuestra atención despegándola de lo importante.
Vaya tela...y es que desgraciadamente el 90% de los programas de todas las cadenas son basura.
Realmente siento lástima, mucha lástima, e IMPOTENCIA!!! Me siento fatal porque cada día, a cada hora que pasa veo más y más hipocresía en todo este sistema, y siento impotencia por dos cosas.

La primera, porque este sistema es una prisión de la que no puedo salir, es muy difícil, verdaderamente difícil, y dejaría demasiadas personas atrás si me desistematizara.

La segunda, impotencia por todas las personas que no comprenden ni quieren comprender nada. Impotencia por todas las personas que se desentienden de todo, que solo los mantiene las ganas de poseer dinero y poder. Ese egoismo...¡dios! (odio tener esta expresión, XD), yo no soy perfecta...pero por favor, ¡necesito ver humanidad! Juntos podemos, pero el problema es que no hay gente suficiente...y siento tanta desilusión por hacer las cosas...por intentarlo.
En fin he de irme a tomar un heladito antes de que empiece el instituto.
¡Ciao!

P.D. Me encanta tu blog, sigue actualizando. ;)